La aventura de la selección española ha llegado a su fin en este Eurobasket tras perder ante Francia, en un partido épico en el que los dos equipos nos ofrecieron un gran espectáculo. Los de Orenga notaron en demasía la ausencia de piezas clave como Navarro o Pau Gasol, que han obligado a dar un paso al frente a jugadores que no estaban acostumbrados a ser tan importantes en el combinado nacional. La inexperiencia en esos nuevos roles de la mayoría de los jugadores ha sido una de las causas de por qué la selección no ha sabido resolver los partidos apretados.
En el partido, el primer cuarto fue muy igualado, los españoles intentaban marcharse en el marcador, pero un gran Tony Parker se encargaba de que su equipo no le perdiera la cara al encuentro, anotando 10 de los 14 puntos que logró Francia en los primeros 10 minutos.
Con el segundo cuarto llegó la mejor versión de la selección española en toda la semifinal, y gracias a una estratosférica defensa, dejando a los galos en 6 puntos, los de Orenga consiguieron poner tierra de por medio y marcharse al descanso con 14 puntos de ventaja. Una diferencia, hasta ayer insalvable en cualquier España-Francia.
Tras el descanso es cuando estábamos habituados a ver desplegar todo su potencial a "la roja", pero esta vez fue todo lo contrario. Los tiros de los españoles no entraban, los pases no llegaban a su destino y poco a poco, siempre liderados por Parker, los franceses se acercaban peligrosamente, reduciendo a tan solo 6 puntos la diferencia a falta de 10 minutos para el final del tiempo reglamentario.
De nuevo España llegaba con ventaja al último cuarto, pero esta vez no había margen de error si querían lograr el oro. Los franceses apretaban y eso hacía que el margen de error se reducía. Consiguieron ponerse por delante a falta de 2 minutos, pero Marc logró que los de Orenga volvieran a tomar la delantera. Ajinça tuvo 2 tiros libres clave, aunque solo anotó uno para poner el empate definitivo. En los últimos instantes, Calderón lanzó un triple para conseguir la victoria, pero no entró y el partido se fue a la prórroga.
El encuentro se iba a decidir en el tiempo extra, todo lo que había pasado en los 40 minutos interiores no había servido para mucho y comenzaba un partido nuevo. Ningún equipo quería fallar, y eso hacía que ambas selecciones apretaran en defensa, haciendo que durante 3 minutos y medio tan solo se hubieran anotado dos tiros libres favorables a España. Entonces Parker cogió las riendas del partido, y puso a Francia por delante. Las imprecisiones en el bando español eran constantes, parecía que las ideas se habían apagado y no había manera de anotar. En los instantes finales, ni la estrella gala ni Diot fallaron un tiro libre y consiguieron que los de Collet tuvieran llegaran con ventaja al momento más importante de todo partido, la bocina que marca el final de cada choque. Marc tuvo un triple para empatar y mandar el partido a una segunda prórroga, pero falló y es Francia el que pasa a la Final.
El jugador más destacado de todo el partido fue Tony Parker, que con una actuación estelar, anotando 32 puntos hizo que Francia consiguiera una remontada sin precedentes dejando a España sin ocasión de revalidar el oro conquistado en Lituania. Por parte de los nuestros, Marc fue el mejor, con 19 puntos y 9 rebotes, y a él se unieron Rudy con 17 puntos y Sergio Rodríguez con 11 puntos y 9 asistencias, aunque no consiguieron contagiar al resto del equipo y se quedaron demasiado solos.
ESPAÑA 72-75 FRANCIA
(18-14); (16-6); (15-23); (16-22); (7-10)
ESPAÑA: Aguilar (3); Fernández (17); Rodríguez (11); Rey (2); Calderón (4); Rubio (2); Claver (3); San Emeterio (5); Llull (6); Gasol (19); Gabriel; Mumbrú
FRANCIA: Lauvergne (2); Batum (3); Diot (10); Petro (2); Kahudi; Parker (32); Heurtel; Pietrus (5); De Colo (3); Diaw (8); Ajinça (3); Gelabale (7)
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